WMS VS WCS: ¿CUÁL ES EL MÁS ADECUADO PARA LAS OPERACIONES DE SU ALMACÉN?
Antes de invertir en cualquier forma de automatización, es importante evaluar las necesidades específicas y comprender los principios en los que se basa la gestión de almacenes.
Por Mike Weeks, Especialista en soluciones - Industrias de distribución
La automatización de almacenes se ha hecho cada vez más popular en los últimos años debido a la creciente presión sobre el espacio de almacenamiento y los recursos laborales. Los sistemas de gestión de almacenes (WMS) y los sistemas de control de almacenes (WCS) son dos potentes tecnologías que pueden ayudar a las empresas a optimizar las operaciones de sus almacenes. Sin embargo, antes de invertir en cualquier forma de automatización, es importante evaluar las necesidades específicas y comprender los principios en los que se basa la gestión de almacenes.
Entender el WMS y el WCS
Un WMS es una solución tecnológica de software que gestiona todos los procesos del almacén. Proporciona datos en tiempo real sobre la visibilidad de las existencias y un registro preciso de las mismas, automatiza el reaprovisionamiento, mejora la capacidad de respuesta e impulsa el servicio al cliente. Un WMS es diferente de un sistema de control de existencias, que sólo gestiona las existencias a nivel de ubicación y cantidad, pero no la productividad del almacén.
Por otro lado, un WCS es un sistema que controla el movimiento de mercancías dentro de un almacén mientras varios tipos de equipos de automatización manipulan esas mercancías. Se utiliza para controlar los transportadores, los sistemas de clasificación y otros equipos del almacén con el fin de optimizar el flujo de mercancías. Un WCS, combinado con dispositivos de automatización, también puede ayudar a reducir la dependencia de la mano de obra, mejorar la precisión y reducir los errores.
Elegir entre WMS y WCS
A la hora de elegir entre un WMS y un WCS, todo depende de las necesidades específicas de las operaciones de su almacén. En general, un WMS es más adecuado para empresas que necesitan gestionar un gran número de SKUs y tienen un alto volumen de envíos entrantes y salientes. Algunos de estos procesos incluyen la inspección de mercancías entrantes y el control de calidad o la gestión de mercancías únicas o fuera de lo común.
Por otro lado, un WCS es una mejor opción para las empresas que necesitan optimizar el flujo de mercancías dentro del almacén y quieren reducir la dependencia de la mano de obra. Esto es especialmente útil para empresas con grandes almacenes y un gran volumen de pedidos.
En algunos casos, las empresas se dan cuenta de que necesitan de un WMS e de un WCS para optimizar plenamente sus operaciones de almacén. Combinando ambos sistemas, las empresas pueden obtener lo mejor de los dos mundos y lograr la máxima eficiencia.
Implantar primero un WMS ayudará a gestionar el inventario y los envíos, lo que proporcionará información valiosa sobre las necesidades y requisitos específicos del almacén. Al conocer mejor los niveles de inventario y el rendimiento de la mano de obra, el jefe de almacén puede tomar decisiones más informadas sobre el espacio necesario para almacenar la mercancía, lo que también ayudará a decidir mejor en qué tipo de automatización invertir y cuándo hacerlo.
Conclusión
Las operaciones de almacén son fundamentales para el éxito de cualquier empresa que trabaje con bienes físicos. Mediante la implantación de tecnologías avanzadas como WMS y WCS, las empresas pueden optimizar sus operaciones de almacén y mejorar su cuenta de resultados. Sin embargo, es importante evaluar las necesidades específicas y comprender los principios que subyacen a la optimización de la gestión de almacenes antes de invertir en cualquier forma de automatización. De este modo, las empresas pueden elegir el sistema adecuado para sus operaciones y lograr la máxima eficiencia y, en última instancia, un mejor perfil de inversión para sus operaciones.
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